Glauco Montagna se encuentra al frente del segmento de agua y saneamiento de Schneider Electric en América del Sur. La compañía despliega sus productos y soluciones para contribuir a resolver a la problemática hídrica en la región, donde a pesar de la elevada disponibilidad del agua, aún quedan retos a los que hacer frente.
Pregunta - En primer lugar, háblenos brevemente de su trayectoria profesional.
Respuesta - A mediados de este año, completaré 23 años trabajando en el área técnica-comercial. Pasé por varias compañías multinacionales desarrollando actividades como técnico de ventas, como gerente de ventas, gerente de marketing, alcanzando la posición actual de líder de segmento en América del Sur para el segmento de agua y saneamiento en Schneider Electric.
P. - ¿Cuáles son los principales desafíos de la gestión del agua y las aguas residuales en América del Sur?
R. - Todavía tenemos una gran falta de servicios básicos en la región. En América del Sur tenemos una situación que incluso podría considerarse buena, que es el porcentaje de personas con acceso al agua (96,4%), pero esto equivale a decir que prácticamente tenemos una población dos veces mayor que la de Portugal sin acceso al agua que es lo más básico de la vida: beber agua potable en una región del planeta donde hay varios acuíferos y grandes ríos de agua dulce. Con respecto al acceso a servicios de alcantarillado, el porcentaje alcanza el 83,2% en total, con países como Brasil donde este número alcanza el 50,3%, una situación que además de traer serios problemas de salud también ayuda a contaminar nuestros ríos, lagunas y mares con aguas residuales que se descargan directamente en la naturaleza. Todos estos datos proceden del Instituto Trata Brasil. Por lo tanto, uno de los grandes desafíos es cómo gestionar de manera eficiente en un escenario donde el CAPEX aún prevalece sobre el OPEX. Asociados a este desafío, también tenemos otros problemas: el aumento de la legislación y las regulaciones asociadas con los impactos ambientales, requerimientos de mayor eficiencia operativa y energética, la necesidad de nuevas fuentes de recursos hídricos cada vez más distantes de las grandes ciudades, la reutilización de agua y las plantas de desalinización con foco en el mercado industrial.
P. - ¿Cómo cree que la smart water o la digitalización puede contribuir a enfrentar estos desafíos?
R. - La smart water es una de las principales soluciones para muchos de estos problemas. Todos los operadores de sistemas de distribución de agua potable necesitan información en tiempo real relativa a todas las áreas de su negocio; es decir, los datos operativos deben interactuar con software comercial, registro de clientes, sistemas de georreferenciación, datos de laboratorio y otros. Con este tipo de solución, es posible obtener eficiencia energética y operativa, además de tomar decisiones objetivas en situaciones convencionales de operación o imprevistas (por ejemplo: la ruptura de una tubería). Esto solo es posible con una solución integrada como la arquitectura EcoStruxure de Schneider Electric, que engloba todo el alcance necesario de soluciones para la gestión inteligente del agua, desde los elementos más básicos de campo ya conectados y la tecnología IoT hasta las diversas soluciones de control y monitorización que llegan al software analítico y los servicios digitales en la nube.
P. - ¿Qué países de Latinoamérica están adoptando la digitalización del agua más rápidamente, y a qué se debe?
R. - Chile, Argentina, Brasil y Colombia han sido líderes en la región. Esto se debe al hecho de que en estos países, los principales actores en este mercado ya han alcanzado un alto grado de madurez, y han logrado invertir en la base y la parte media de la pirámide de las necesidades de digitalización, permitiendo así la implementación de este tipo de soluciones. Aquí me gustaría dar al menos dos ejemplos de digitalización del sector del agua en nuestra región. Uno de los casos se refiere al proyecto PTAR Salitre en Colombia, donde proporcionamos una solución completa de distribución de energía, que consiste en paneles de media y baja tensión, sistemas de monitoreo y control, con un software analítico que permite el control de los activos, el monitoreo del consumo/calidad de la energía para permitir al cliente cumplir con todas las regulaciones necesarias además de aumentar la eficiencia energética de la planta depuradora de aguas residuales. Otro proyecto emblemático ha sido Aquapolo en Brasil. Es la quinta planta de reutilización industrial más grande del mundo. Nuestras soluciones han incluido instrumentos de campo conectados, el sistema de control de supervisión para toda la planta y el software de planificación para la producción de agua reutilizada que se procesa en un sistema de ósmosis inversa y ultrafiltración, lo que permite al cliente servir agua a todos los clientes industriales dentro de los parámetros de calidad contratados. En este proyecto también tuvimos un piloto para nuestra solución de realidad aumentada. Dicho proyecto ganó el premio AMCHAM ECO por ser una referencia de sostenibilidad.
P. - En su opinión, ¿el IoT puede ser la clave para el avance inteligente de la industria del agua? ¿Por qué?
R. - Sin duda, el IoT es la base para la digitalización del sector. En el pasado, la operación de plantas y sistemas de bombeo era casi totalmente manual, sin estándares de eficiencia y calidad. Luego pasamos a automatizaciones independientes que permitieron una evolución más, pero las diversas aplicaciones no intercambiaban datos entre ellas. Y finalmente llegaron los equipos conectados que, además de tener la función de conectividad de forma nativa, también se pueden ver de forma remota, permitiendo el control de la vida útil de cada activo (por ejemplo: detectar necesidades de calibración remota). Siempre teniendo en cuenta la importancia de la ciberseguridad, que es una condición que surge al mismo tiempo que se decide la adopción del IoT.
P. - Desde Schneider Electric, ¿cómo apoyáis a las obras de servicios y a las empresas gestoras de agua a nivel local (como Sabesp, Aguas Andinas o Caesb)?
R. - Schneider Electric tiene en América del Sur un equipo dedicado a atender a los operadores de agua y saneamiento y a todo el ecosistema involucrado en su negocio, con perfiles como: prescriptores, arquitectos de soluciones, especialistas en productos e ingenieros de ventas... Además, tenemos una de las redes más grandes de socios aprobados (integradores, constructores de cuadros eléctricos y distribuidores) para cubrir todo el territorio, ya que este segmento de mercado está ampliamente distribuido en cada país. De esta manera, podemos servir tanto a operadores públicos como privados, compañías EPC, fabricantes de equipos de proceso y compañías de ingeniería / consultoría para todo el ciclo del agua.
P. - La región de América Latina fue pionera en la aplicación de la estrategia de sostenibilidad de Schneider Electric. Háblenos del proceso de implantación y su acogida entre el sector.
R. - Realmente, hemos estado trabajando en la estrategia de sostenibilidad de Schneider durante casi diez años en América del Sur, teniendo el acceso a la energía como uno de los pilares principales, el cual está totalmente conectado con el acceso al agua cuando se trata de regiones más alejadas de los grandes centros, las cuales dependen de la electricidad para bombear agua de pozos artesianos. Cuando ofrecemos nuestros productos y soluciones al mercado del agua, buscamos el valor añadido de sostenibilidad que podemos brindar a nuestros clientes en términos de generación de residuos e impactos ambientales. A su vez, nuestros clientes han reconocido esta posición de manera diferenciada y positiva.
P. - ¿Podría dar algunos resultados cuantificados de los beneficios proporcionados por sus proyectos en Latinoamérica?
R. - Sí. En el proyecto Aquapolo ya mencionado, a través de la solución EcoStruxure Schneider Electric implementada, logramos un aumento en la eficiencia operativa de hasta un 15%. Esta solución sostenible pone a disposición en tiempo real más de veinte indicadores o KPIs, lo que permite la generación de facturas y también garantiza a SABESP la disponibilidad de un volumen de agua potable para abastecer a una ciudad equivalente de 500.000 habitantes. En el proyecto de la PTAR Salitre (Bogotá - Empresa Acueducto de Bogotá), que se encuentra en las etapas finales de implementación, al proporcionar una solución completa de control de motores inteligente (MCC, Motor Control Center), una herramienta de administración de energía, y la monitorización del equipamiento eléctrico crítico, se reduce el tiempo de inactividad de la planta con una mayor producción programada, se asegura una mayor eficiencia energética y se optimizan los tiempos de mantenimiento.
